En un mercado muy disperso, quienes dispongan de dólares y comprenden el
mercado y sus vaivenes, pueden conseguir oportunidades entre un 15% y hasta 25%
menos, que la baja en las ventas es muy marcada.

La ciudad de Córdoba capital es una de las plazas del interior que siempre ofrece
novedades en el Real Estate. Su potencial edilicio es relevante y si bien no está para
nada exento de la coyuntura económica, se mantiene la confianza en el ladrillo y
progresaron varias zonas aledañas en los que los propietarios buscan vivir en buenas
viviendas a mano de todos los servicios.
La Cámara Inmobiliaria de Córdoba asegura que el mercado inmobiliario del usado, en
compraventas de inmuebles, está resentido desde hace más de 3 años.
Córdoba tiene importantes empresas y plantas fabriles, como un gran dinamismo
comercial, por lo que siempre hay gente con intenciones de poder acceder a una
vivienda. A pesar de todo, los clientes que disponen de dólares y comprenden el
mercado y sus vaivenes, traccionan el mercado y consolidan operaciones inmobiliarias
con valores de un 15% y hasta 25% menos (por las grandes contraofertas que existen).
Saben que los descuentos que logran es porque tiene el dinero en sus manos.
Los barrios Nueva Córdoba, General Paz, Alta Córdoba, y algunos puntos de Alberdi,
son los de mayor demanda, como así el Centro de la ciudad. Los factores que
determinan la búsqueda de estas zonas, tienen que ver con la cercanía a las
universidades, los transportes y la seguridad. Más de 100.000 estudiantes llegan por
año a la capital para cursar en las universidades.
La expansión se propagó también hacia localidades vecinas muy cercanas a la ciudad,
como La Calera, Malagueño, Villa Allende y Alta Gracia. Otros puntos que atraen a los
inversores y propietarios, son Villa Belgrano en la zona norte, o Jardín Espinosa, en el
sur, en donde se desarrollan condominios privados en altura de categoría Premium.
La recesión impacta en Córdoba y la demanda lo sufre desde hace meses. Pero se
sostiene que, si bien las operaciones y las consultas bajaron, hay expectativas porque
se siguen efectuando acuerdos de propietarios que en su mayoría buscan satisfacer las
aspiraciones personales (crecimiento de la familia, por ejemplo) y los que están a la
espera de oportunidades.
En lo referido con las cotizaciones de los inmuebles, en Córdoba hay bastante
dispersión. Los valores promedios son relativos por la inexistencia de índices urbanos
oficiales. Igualmente, como parámetro, una casa de 3 dormitorios estándar, en un
barrio de clase media, ronda los 85.000 dólares, y un departamento de 1 dormitorio,
de la misma tipología y zona, unos 55.000 dólares.
El mercado de casas es más amplio y con el avance de las propiedades para vivir en el
verde, las unidades de iguales dimensiones y calidades, en un barrio cerrado salen
entre un 25 y 30% más que en los puntos que no tienen seguridad privada. El precio
del m2, a estrenar para la venta se ubica entre 1.100 y 1.300 dólares, pero puede ser
mayor dependiendo del proyecto y su ubicación.

Llevamos más de 14 meses consecutivos de caídas de las operaciones, a excepción de
octubre de 2019, en el que se reflejó un pequeño repunte que luego volvió a caer.
Otra tendencia que fue muy bien recibida por el público cordobés desde hace más de
un lustro son los condominios de departamentos de mayor categoría, con amenities
(gimnasios, piletas, sum, solárium, espacios de recreación y salas para niños, entre
otros). Aquellas personas que superan los 50 años y tiene hijos mayores y buscan
espacios más reducidos, con seguridad las 24 horas y sin perder comodidades, son
quienes los eligen.
Como en toda coyuntura la inestabilidad se hace presente y en Córdoba las
desventajas del sector están muy ligadas con lo que ocurra con el campo. Más allá de
la tardía recuperación de la economía en general, se suma cierta incertidumbre sobre
posibles nuevas retenciones más la ausencia de un criterio generalizado para valuar
propiedades. Esto confunde a los propietarios, además del impacto de las
devaluaciones y el bimonetarismo que caracterizan el mercado inmobiliario.
Desde el lado del desarrollo, se indica que hay pocas ventajas en este momento. A la
falta de financiamiento y tasas altas, se suman las dificultades de mejores servicios,
como agua y energía en algunos puntos de la ciudad, y la falta de fluidez en la
administración pública municipal que hacen largo y dificultoso el proceso de obtener
las aprobaciones y los permisos de obra, así como los plazos para obtener los finales de
construcción.

(Síntesis adaptada de informe de Infobae de febrero 2021)